NO MÁS EXÁMENES

  • Print

Ya ha empezado el curso. De vuelta en el aula todo sigue igual. Dentro de cuatro días empezarán los exámenes. Sugata Mitra es un profesor de la Universidad de Newcastle que asegura que los exámenes son una amenaza.
Este profesor ganó con su proyecto educativo el TED prize en 2013.  Este prestigioso premio se da a una idea innovadora que cambie el mundo en cualquier campo de trabajo, este año el TED se ha otorgado a una arqueóloga que encuentra ruinas gracias a un satélite.  Sugata hace años que se percató, gracias a evidencias científicas aportadas por la Neurociencia, de que el centro de nuestro cerebro donde se  decide incoscientemente si estamos en peligro y es necesario escapar ante una situación apaga otras partes del cerebro como la región que juega un papel primordial en la coordinación de pensamientos. Los exámenes son percibidos como una amenaza y, por tanto, la creatividad se bloquea. Si le preguntas a un estudiante qué le pide el cuerpo durante un examen, su respuesta será salir corriendo. El estrés le lleva a pensar que no es el momento para las grandes ideas. 
Basándose en estos conocimientos este profesor probó un nuevo método de enseñanza denominado SOLE en el que el profesor apenas aparece.  El alumno es el que dirige su propio aprendizaje sin necesidad de que le den muchas explicaciones.

                                  “Escucho y olvido,
                                   veo y recuerdo,
                                   hago y entiendo”

Según el método SOLE el alumno debe perder el miedo para recuperar el placer de aprender.  El método educativo actual en el que los alumnos están en clase escuchando al profesor mientras ellos guardan silencio tenía sentido en épocas imperiales en las que la población debía estar entrenada para vivir bajo la amenaza de las guerras. Seguir con el mismo método educativo hoy en día es un anacronismo.  Los tiempos han cambiado, la sociedad ha cambiado, y si pones a un niño frente a un ordenador todo le parece interesante y disfruta.  No es necesario que un adulto esté encima ordenándole guardar silencio.  Los niños de hoy en día están preparados para ser el guía de su propio aprendizaje y verlo como un disfrute, no como una obligación.  Esto no significa la desaparición de los profesores, su misión sería la de realizar las preguntas adecuadas para que los alumnos busquen por sí mismos las respuestas.  Los profesores deben evolucionar, no pueden seguir encima de una palestra dando clases magistrales y una vez terminadas repartir hojas en blanco para examinar a sus alumnos, esto es lo que quiere evitar este nuevo método educativo que en la actualidad siguen en Madrid dos colegios concertados y uno público.  ¿Están dispuestos los profesores españoles a perder el protagonismo?¿A dejar de dar respuestas para decir: “- estas son las respuestas posibles que vosotros habéis encontrado”? 
No solamente está el poder de los profesores en juego (En España tradicionalmente los que mandaban eran: el médico, el cura y el maestro, esto no ha cambiado a día de hoy), existen otros intereses en juego, como por ejemplo el dinero que mueven los libros de texto que cambian cada dos años.  A fin de cuentas los intereses económicos son los que rigen también la educación y “el fracaso escolar” es un fenómeno que permanece en segundo plano.